Estaba.
También dejó de estar.
Nieva y arde
el azul
a veces
en el tren
me pierdo entre
ventanas
el rojo del día
ancianos y soledad
natillas de colegio
a veces
estuvo
a veces
se iba y volvía
hasta que un día
se fue.
Se va.
Y a cada
vez
un año de más y otro de
menos que vuelve
y va entre las olas
a ras de las orillas
tus mejillas
elevadas en la sonrisa y
luego
llanto. Ya no somos ángeles,
perdimos la fe a los siete.
Hay extraños en la noche,
muchas hogueras,
leña al fuego, calor, furor,
días perdidos en los bosques de lo vivido
hay
mucha pasión
y pocos sitios donde guardarla porque
ahí donde levanto la mirada
habita el recuerdo
vestido de olvido.
Hoy sé que estuvo.
También sé que ya no volverá.
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