Recuerdas buscar en tus bolsillos para sacar las sombras a relucir y ver sus ojos de luna. ¿Recuerdas? Aquella guerra en tu mente, tú contra la vida, bombas de esperanza y también de desamparo. El futuro es difícil en esta ciudad de bestias, ¿no? Acero, asfalto, corbatas, tráfico, y debajo de las sombras de los bolsillos de la gente
también amor. Pero, saquémoslo a la luz de una vez y alumbremos nuestras almas.
¿Recuerdas? Tú que decías
¿Recuerdas? Tú que decías
-Me iré a un campo infinito donde no tenga que pretender ser nadie. Será cada día viernes y no tendré que sacarme un título para ser alguien. Seré, simplemente, y ahí residirá mi purza. No fingiré, ni me colocaré como máscara un disfraz, ni habrá nada en mis bolsillos, porque no tendré ropa, y el amor será lo que lleve mi Cara por bandera.
-¿Y te irás así, sin más, al campo y abandonarás todo esto? ¿Y qué hay de la magia del centro de esta ciudad?
-Quizá el campo del que hablo es la parte invisible de esta construcción de asfalto.
Todos pasamos por esa guerra alguna vez. El sueño de abandonar el asfalto de esta ciudad, pero te metes las manos en los bolsillos, encoges los hombros y sigues adelante.
ResponderEliminar